Friday, October 27, 2006

4. INTRAMUROS




© Copyright 2005, by Varios Autores
Primera Edición: Diciembre 2005

Colección Ideas
Director: Max González Sáez

Edita y distribuye: MAGO Editores
Merced Nº 22 Of. 1002, Santiago
Fono / Fax 664 5523
E-mail:
editorial@magoeditores.cl
www.magoeditores.cl

Registro de Propiedad Intelectual Nº 152.045

ISBN: 956-8249-49-4

Diseño Portada e Interiores: Ricardo Barrios Venegas.
Fotografía Portada: Miguel Angel garcía

Impreso en Chile / Printed in Chile

Derechos Reservados

VARIOS AUTORES: José Atonio Barros / , Gabriel Gallardo, Ronald Harris, Lionel Henriquez B , Margarita Ivo, Gloria Jopia, Patricia Lara Arriagada, Cesia Leiva, Benjamín León, Margarita Muñoz Correa, Franco Muzzio Salas, Joaquín pereira Díaz, Amanda Del Río, Antonia Del Río, Ernesto Wurth.

POEMAS ANTOLOGADOS de Lionel Henriquez B

1.DUALIDAD

¿Cómo puede el ruido
reclamar su derecho
si ha vivido temeroso
escapando del silencio?.

Olí, sí, olí, la maldad
cuando floreció en su hedor
y la palpé, sí, la palpé
cuando brotaron las espinas
entre las palmas del desierto.

Me atragantó la injusticia
con su hirviente resina
y la arrojé sin parpadear
entre las enmascaradas ruedas
que gemían con las arañas del camino.

Sí, junté los sentidos.
Con ellos recorreré ruido y silencio
buscando romper su dualidad.


2. TRASTROCAMIENTO

Con la luz del silencio
tus manos buscaron en la repisa
el poema que había escrito
una mirada soñadora.

La melodía del sol del atardecer
se sumergió entre tus sienes,
en caricias por fatigadas pestañas
que leían en el hilván de lágrimas y sonrisas.

Se reflectó tu rostro en espejo cóncavo
mudando en fantasías el paladar de tu cerebro.
Te embriagaste con las angustias y alegrías
que abrasaron tus sensibles latidos.

Tus ojos despertaron del letargo
al mirar tras entreabiertas ventanas,
un colibrí libando la esencia de una azalea.
Con su vuelo se lavaron las alucinadas pupilas,
arrobándote en la armonía de sus transparentes alas.


3. EPILOGO

Nada dejo atado
ni siquiera tu sonrisa.
Mi viaje terminará por entre
arces y cipreses,
que se confunden con lápidas
y que se diluyen
entre la escarcha y el lodo.

Mi perro aullará canciones,
le cantará al viento,
lo querrá morder,
correrá entre los árboles,
buscará mi silueta en sus recuerdos,
viajará hacia ella
en el hilo de sus aullidos.
Morderá su cola
rascará sus orejas,
se revolcará en el barro,
lamerá sus heridas
y se echará sobre mi tumba...
Viajaré de noche, desnudo
vestido con Tu Silueta,
amoldándome en Tus Huellas.
Tus Lágrimas serán aceite
para mis lamentos.
Encontraré Tus Huesos
encarnados en el polvo
y la tierra será mi aliento.
Usaré Tu Manto,
entonaré Tus Canciones...

Mi perro moverá su cola,
al sentirme
al olerme
cuando en viaje hacia el vientre
pase por el marco del nicho,
para vivir nuevamente
en la oscuridad,
húmeda,
tibia,
que vestirá mis sueños
en otro despertar y...
Sólo páginas en blanco.


4. IMAGEN VITAL

¿Que es la vida, sino un estado,
un estado de mutante vibración?

¿La primavera?
Sólo vibraciones de tambores.
¿El verano?
Sólo pitos y flautas en vibración.
¿La madurez?
Sólo vibraciones.
¿El otoño?
Sólo flautas y pitos en vibración
¿El invierno?
Sólo vibraciones de campanas seculares.

¿Qué es la muerte, sino un estado,
un estado de mutante vibración?.

He puesto mis ojos bajo una misma ceja,
como en los días misteriosos,
y los tambores y flautas
y los pitos y las campanas
irrumpen creciendo y decreciendo
en ruido ensordecedor.

Y no es el ruido vital.

Y los murmullos deben habitarme
hasta el día en que mis oídos
cierren sus páginas.
Y sólo ese día, mis tímpanos, mis ojos,
mi nariz, mi lengua y mis manos,
como un solo libro,
los recogerán en las bóvedas
de mi cráneo enmudecido.

Y vibraré con ellos más fuerte que la luz.


5. ADIOS, al amigo de una vida

La noche ha cerrado sus párpados.
El día reinicia su eterno pestañeo.
Has vuelto al lugar que te abrió los ojos.
Las flores han trocado sus formas y colores.
La Tierra se ha vuelto Luz y abre sus compuertas
su Matriz se inunda de colores fosforescentes
esperando incubarte en el calor de sus entrañas.

Las nubes viajan en el tiempo: buscan huellas
para tu andar entre el jardín y las esferas.

Tus ojos ven lo que yo no he visto
en páginas de hombres simples.
Tus pies calzan las lágrimas de hombres singulares.

Tu rostro se refleja tras los espejos.
Tu corazón titila al compás de las estrellas
al viajar por túneles que conectan Universos.
Tus manos con los ojos de la Tierra
buscan lo no visto
y encuentran lo que vieron los Dioses.

Tu mente gobierna tus emociones,
has roto la energía de escape.

Eres Libre, eres quien debe ser.

6. LA ESCENA

Quise pintar la escena
cien veces maldita.
Mi corazón momificó mis dedos.
No era asunto de colores.

Quise cantar la escena
mil veces maldita
y mi alma durmió mi lengua.
No era asunto de palabras.

Quise mirar la escena
enrolladamente maldita.
Mi cuerpo paralizó vísceras.
No era asunto de aromas.

Quiero variar la escena
que algunos perciben en vigilia:
alucinaciones de sus perdidos yoes.
Mi frente chocó con las nubes.
No es asunto de deseo.

Entre sueños y vigilias
veo al druida y al pascuero
regalando máquinas de guerra
y cortezas de robles tecnológicos.
Es discusión lobular.

No pintaré y no cantaré y no comeré
y caminaré por la escena
cantando, mirando y comiendo
palabras, frutas y colores
de las manos
de los libertos mutantes
hacia el contradictorio dormidero
donde lo maldito Es.

Y aunque parpadeen mis rodillas
no es asunto de conciencia ni sentido.


© Lionel Henriquez B

Thursday, October 26, 2006

3. NUEVA POESÍA HISPANOAMERICANA.


4ª Edición. Lord Byron Ediciones
COMPILADOR: Leo Zelada

Varios Autores: Belquis Ivonne Barés, Diego Muzzio, Graciela Zolezzi, José Geraldo Neres, Alfonso Chase, Santiago Azar, Patricia Lara Arriagada, Juan Carlos Morales, Julio Torres-Recinos, Juan Carlos Gómez Rodríguez, Jaime Siles, Humberto Ak’abal, Jeannette L. Clariond, Miguel Hernández Madero, Ernesto Lumbreras, Miguel Ildefonso, Enrique Verástegui, Arturo Carrera, Pedro Nazar, Maribel Sánchez-Pagán, Leonor Carrasquilla Castello, Germán Nogueira Gómez, Roberto Bolaño, Raúl Zurita, Ernesto Proaño Vinuesa, Felipe Benítez Reyes, José Daniel Palma Llera, Luis Antonio de Villena, Carmen Ávila Jaquez, Selfa A. Chew, David Huerta, María Elena Solórzano, Héctor Ñaupari Belupú, José Watanabe, Manuel Lozano, Silvia Graciela Oliverio, Aníbal Crespo Ross, Raúl Gómez Jattin, Zoé Valdés, Lionel Henriquez B., Bertha Mendoza Tapia, Otoniel Guevara, Teresa Domingo Cátala, Leopoldo María Panero, Tino Villanueva, Francisco Azuela, Humberto Garza, José Martín Hurtado Galves, Lucía Yépez Villafuerte, Carlos Oliva Valenzuela y, Leo Zelada.

Lima, Mayo de 2004

POEMAS ANTOLOGADOS de Lionel Henriquez B. .

1. PROYECCIÓN (o una muerte anunciada)

Desde el umbral de la ventana
llovieron pétalos de luces
hacia los rincones de mi habitación.

Caminé por los corpúsculos de oro
desde mi espejo enclaustrado
hasta los pasillos de mármol,
esqueleto de la capilla.

Sobre túnicas endiosadas
respiraron campanas,
al enseñorearse
en mis ojos
cuerpos y rostros
perfilados.

Se hilaron a la zaga de una aguja,
penetrando por mi coronilla.
Viajaron por los nichos
de la médula y de la sangre
en busca de mis pies.

Hilvanaron mi cuerpo
a la loza empotrada
en la Tierra de otros Dueños.

Ahí, en la soledad del laberinto,
los rincones de mi habitación
se pintaron con sangre,
en los Libros del Silencio.

Y sólo ahí, la ventana
me abrió sus cortinas a la oscuridad.


2. DESDE UNA VENTANA

Desde las puertas del horizonte
bebiste en sosiego la savia de la oscuridad.
Y el ánfora ocupada por tus cenizas
recibió el calor de la resina
diluida por mis manos.



El sudor del cielo subió por arterias
transportando tus enhebrados dolores
desde el corazón de la Tierra.

Latieron mis sienes migratorias
al resbalar las empantanadas angustias
por la límbica garganta del ánfora.
Y al embeberme en los sueños
de los falsos agoreros,
en mis palmas
lloró el cántaro mortuorio.

Caminando en vaivén con pies desnudos
entre mis retinas, la Matriz y las Esferas,
las cenizas de los Augures
alimentaron mis visiones,
reordenando tu vacío
en la fogata del Firmamento.

Wednesday, October 25, 2006



2. NUEVA POESÍA HISPANOAMERICANA.



3ra Edición. Lord Byron Ediciones

COMPILADOR: Leo Zelada



Varios Autores: Manuel Lozano, Pedro Nazar, Eduardo Gómez, Zoe Valdés, Luis
Correa Díaz, Bernardo Gonzáles Koppmann, Lionel Henriquez Barrientos,Mario
Meléndez, Raúl Zurita, Bertha Mendoza Tapia, George Reyes, Txanba Payés, Julio
Torres, Felipe Benites Reyes, Mar Calvo Suances, Teresa Domingo Cátala, Pilar
García Puerta, Juan Carlos Gómez Rodríguez, José Daniel Palma Llera, José Repiso
Moyano, Elvira Riveiro Tobío, Luis Antonio de Villena, Francisco Azuela,
Jeannette L. Clariond, Selfa A. Chew, Ricardo Dávila Flores, Estela Guerra
Gárnica, Miguel Hernández Madero, Ernesto Lumbreras, María Dolores Pliego
Domínguez, Reyna Hinojosa Villalva, María Helena Solórzano, Harold Halva Viale,
José Mauel Calderón, Denis Castañeda, Miguel Idelfonso, Héctor Ñaupari Belupú,
Enrique Verástegui, Leo Zelada, Edgard E. Ramírez Mella, Lourdes Vásquez y, Yoe
Francis Santos.

Lima, febrero de 2004



1.CANTO A UNA CEREMONIA (Entre murallas de granito)



En vigilia soñé
que mis manos se deslizaban
por cables de acero
hacia recintos no habitados
por relojes y galaxias,
y entre un abrir y cerrar
sus puertas al vaivén de mis sentidos
me encontré en el templo de las diosas.

Y allí cantaba:

Canto a ti mujer de mis versos
sacerdotisa de tu propio vientre
que oficias a la luz de tus senos
la ceremonia de los huesos danzantes.

Canto a ti mujer de los tres velos
y canto al velo de tu sonrisa sesgada
y canto al velo de tus ojos nacientes
y canto al velo tríptico de tu mirada.

Y lo canto en tu altar de consumación
donde tu destino y el mío se escurren
entre los filamentos de mis dedos.

Y también te canto en mi altar
donde tu vientre, tus senos, tus ojos
se pasean por envolturas volcánicas
por los ventrículos de tu corazón.

Y seguiré cantado la salmodia de tu voz
cada vez que escuche los huesos danzantes
entre los eclipses de nuestros templos.


2. ¿QUÉ MAS QUIERES DE MI?

Duende, ángel o demonio
que paseas cantando por mi jardín.
No sé cuál es tu nombre
no sé como invocarte.
Sólo sé que estás en mis hombros
con tus brazos
enredando mi cuello
estrujando mi garganta.

Atormentas mis sensaciones
con voz gutural
con gritos lastimeros
desde el fondo de tu caverna.

Besas mis sienes,
con tu voz prisionera del silencio
aúllas en mis oídos,
mientras duermo en el camino.

Tus paisajes, tu horizonte
tus eléctricas visiones,
engarzadas en mis
nostálgicas neuronas,
proyectados entre viñetas
de fibra de vidrio, de óptica voz,
de colores parlantes,
ya son míos.

Y las efímeras balas
de tu fugaz humildad,
ya han perforado mi vacío.

Omnisciente, Omnipresente, Inescrutable,
¿qué más quieres de mí?



1. SIN TINTA NI PAPEL

Título : SIN TINTA NI PAPEL. ANTOLOGÍA
Autor : VARIOS AUTORES : Antonia, Gregorio, Cristian, Paola, Luisa, Drako,Nadja, Lionel,Fatamorgana, Gustavo, Nocturna, Juan Ricardo,María Graciela,Payazoo, Carolina Aldunce, Cuatro, Cao, Vladimir, Inimia, Patricio, Caro, Roberto, Paulo, Dión Zegal, José Domingo y Crismar (Nicks usados en la página literaria web http://loscuentos.net/)
Formato : 15 x 21 cms.
Páginas : 270
Edición : 1ª Edición
Año : 2004
ISBN : 956- 8249-06-0
Materia : Poesía
Reseña : SIN TINTA NI PAPEL es una antología que reúne los trabajos de los participantes del sitio web, los cuentos.net. En este texto se halla una polifonía de voces que antes exclusivamente se desplazaban por el ciberespacio, no obstante en este libro su apuesta en porque se busca un lector diferente. Son 26 los antologados, y constituyen un referente significativo al momento de citar las nuevas producciones literarias de principio de siglo.
Editorial : MAGO Editores

POEMAS ANTOLOGADOS de Lionel Henriquez B (lionel).

1. TESTAMENTO

Mucho tiempo me queda por estrujar.
Nacerán miles de ratas y ratones
roerán relojes y galaxias.
Mi cuerpo no será de ellos.

Los de cola pelá, en mi urna
con sus negros y babosos ojos,
destilarán en el cemento sus orines
y sus panzas se volverán ojerosas.

Arrastrando sus sucias colas
miran mi encierro,
masticando sus pulgas,
esperan, desean que vuelva
del vacío, al origen de sus alcantarillas.

Con movimiento rectilíneo
me viraré a la recta de la vida,
esquivando los pestilentes roedores.
Sus dientes rasparán el pavimento
esperándome, guiñándose entre sí.

Al salir por la puerta del nicho,
entrarán por las desclavadas maderas,
se alimentarán de las desganadas vestimentas.

Sólo quebrarán sus dientes en mis blancos huesos testados.

2.ALIENACION

I. ANTESALA

Elipses aletargaron mis manos,
curvas anudaron mi ser,
tifones abrieron sus fauces.

II. LETARGO

Me sumergí en sangre
y aguardiente de médula
atravesando transitorias vidas
hacia los nichos de luz
donde lo bendito y lo maldito
se aman entre los cactus del desierto...
Y nada pude hacer.

III. SOMETIMIENTO

Malditos mis yoes
que boquiabiertos me ordenaron
abrazar con sonrisa alienante
las tumbas de las arañas.
Y no lo pude impedir

IV. LIBRE

Maldita y bendita sea la voluntad
que me deja buscar entre piedras
con apretados zapatos
pétalos de luna
entre mis visiones.
Y no puedo ni quiero despertar.

V. MUERTE

Pero debo caminar y correr
tragando estrellas y horizontes nebulosos
para agonizar en lecho de copihues.

VI. REFLEXION

Solo puedo gritar:
bendito el clavo que rasgó mi alma
y que dejó mis pies descalzos
en el hielo y las ardientes arenas
fundiendo mi vida, mi muerte,
cuando sonaron las campanas
del reloj del Universo.

VII. SUBLIMACION

Bendito sea el llanto
por el amor y el dolor
que se evaporan por las paredes
de mi botella de Klein
hacia los arcanos del Universo.
Bendita sea tanta contradicción.

VIII. RENACIMIENTO

He creado anticuerpos.
¿Pero la lluvia, la explosión
de pétalos, mariposas y escarabajos,
sólo mojarán y harán sangrar mi cuerpo
si me autolelijo con sonrisa alienante?

IX. EPILOGO

Maldito sea, si pongo la mesa
a mi ego masticador de vértigos
y más si me siento junto a él.


3.QUE PENA ME DAS ( o la transfiguración de una autocrítica)

¡Que espectáculo!
¡Que pena me das!
Pirquinero que escarbas
buscando oro
en el estiércol.
y no sabes que lo tienes
en la mente de tus ojos
en la mente de tu cerebro
en la mente de tu corazón,
en lo profundo de tu Yo.
Y ahí no lo buscas.
Y más, te criticas
con parapléjicas palabras
que para ti son oro
pues crees tener
la piedra filosofal.
¿No te das cuenta
que sólo es plomo
decantado
en el fondo de la vasija
que sostienen tus manos?

No olvides
en ti está lo aurífero,
tú eres el oro.
Búscalo
sin temor de encontrarlo.
Si no lo encuentras
sólo viajarás en el hoy
encima de una carreta
y dormido en el nuevo milenio.

Y no critiques
al que busca
abrazar su esencia
para viajar con ella
entre el ayer, el hoy y el mañana.

La trascendencia
no es la razón de tu deseo.

4.TODO DE NUEVO

El negro tinte de la sangre
se desquicia por mi piel
al ver viajar tu voz errática
como el vuelo de la mosca

Traspasas las telarañas del pasillo,
el fuego transforma
tus ojos en aguardiente.

Los enmohecidos goznes de la puerta
ceden a tus manos de flor naciente...

Sólo el tibio calor de otra placenta.

5. PROYECCIÓN (o una muerte anunciada)


Desde el umbral de la ventana
llovieron pétalos de luces
hacia los rincones de mi habitación.

Caminé por los corpúsculos de oro
desde mi espejo enclaustrado
hasta los pasillos de mármol,
esqueleto de la capilla.

Sobre túnicas endiosadas
respiraron campanas,
al enseñorearse
en mis ojos
cuerpos y rostros
perfilados.

Se hilaron a la zaga de una aguja,
penetrando por mi coronilla.
Viajaron por los nichos
de la médula y de la sangre
en busca de mis pies.

Hilvanaron mi cuerpo
a la loza empotrada
en la Tierra de otros Dueños.

Ahí, en la soledad del laberinto,
los rincones de mi habitación
se pintaron con sangre,
en los Libros del Silencio.

Y sólo ahí, la ventana
me abrió sus cortinas a la oscuridad.

6.PASION

Mis palmas y mis yemas
fueron cojinetes
al caer
en el abismo de tus brazos
y las agujas de tus manos
fueron los espinos,
aretes de peñascos,
que amortiguaron mi caída
en el abismo de tus brazos.

Y al cazar el tiempo con mis manos
sólo cogí mi aliento en tu sonrisa
en la muralla del abismo.

©Lionel Henriquez Barrientos.